martes, 28 de octubre de 2008

MEMORIA DEL AGUA (1)

281008INUNDAunaño

Inundación de 2007
un recuento obligado
(1)
*Las aguas rebasaron toda previsión
*Miles de casas convertidas en albergues
*Padilla y Evaristo, dos historias aparte

Por Erwin Macario

El miércoles 5 de septiembre de 2007, el gobernador de Tabasco, Andrés Granier, no se imaginaba que la previsión de su gobierno iba a reducir al máximo los daños humanos en lo que casi dos meses después sería la más grande inundación de Tabasco.
Ni el mandatario ni los tabasqueños pensábamos en un periodo de retorno inmediato de los fenómenos hidrológicos, después que en 1999 se había inundado una parte de Villahermosa, hacia los terrenos de Tabasco 2000, donde se asientan los que forman la nueva clase pudiente de esta entidad, que antes vivían en el Paseo Tabasco. Una colonia de clase media baja, Espejo 2, corrió la misma suerte.
Pero el 5 de septiembre de 2007 nadie se imaginaba la tragedia que empezaría el día 27 de octubre y tendría su manifestación más grave el primero de noviembre, cuando las aguas embalsadas en la Laguna del Camaron y los Zapotes —provenientes de los ríos de la Sierra, que no tienen control de obra hidráulica alguna—, rompieron arriba de la colonia Las Gaviotas, en el margen derecho del río Grijalva, frente a Villahermosa, inundaron en menos de una hora esa populosa colonia, hicieron que el Grijalva rebasara su nivel máximo, rebasaron el malecón y se volcaron sobre la capital de Tabasco, que en algunas partes de su centro histórico y comercial estuvo a más de tres metros bajo las aguas.
Dos meses antes, ese miércoles 5 de septiembre, en reunión del Sistema Estatal de Protección Civil, Granier dijo que Tabasco se encontraba preparado para enfrentar los fenómenos meteorológicos que amenacen la seguridad de la población, en especial la de 308 mil personas de 760 localidades asentadas en zonas de mayor riesgo.
Previsiones que se anunciaban no obstante que en esas horas el fenómeno meteorológico “Félix” se había degradado a tormenta tropical, disminuyendo con ello sus efectos en Tabasco, según refirió el propio gobernador.
LA TRAGEDIA DE LOS POBRES
Acababa de pasar el huracán Dean, que en otros lugares provocó tragedias.
Ese día, miércoles 5 de septiembre, el correo cibernético trajo una opinión que Fausto Cantú Peña publicó en Reforma, el 29 de agosto, y nos hizo reflexionar, sin pensar en lo cerca que estábamos de la Gran Inundación y esos efectos: “El huracán "Dean" trajo, con sus torrenciales aguas y feroces vientos, la tragedia a quienes siempre han vivido en la penuria: los pobres del campo en las montañas y cañadas; también a los que se asientan en el cauce seco de los ríos a merced de la apropiación y especulación en la tierra, pues solamente se les deja ocupar áreas marginales”.
Y agregaba: “Pero también trajo en la lluvia toneladas métricas de riqueza proyectada sobre el feraz suelo tropical; alivió en muchas zonas la sequía, cada vez más frecuente debido a la deforestación”.
No. No. ¿Quién iba a pensar lo cerca que estábamos, de comprobar lo que Fausto escribía? ¿Lo infausto de lo que vendrìa?: “Es una lástima que no la sepamos aprovechar; el agua se va al mar en millones de metros cúbicos por segundo, a falta de la infraestructura y política agrícola específica e integral para el trópico húmedo mexicano. Eso sí, los políticos y los medios televisivos sacaron provecho del meteoro, exagerándolo para justificar la chamba, desviar la atención de los problemas de fondo y cultivar el ego; también es cierto: supieron avanzar alertas preventivas a efecto de lograr un saldo blanco en vidas humanas”.
Andrés Granier, mucho menos pensaba en lo que vendría.
TABASCO ESTABA PREPARADO
Esa primera reunión del Sistema Estatal de Protección Civil, el mandatario tabasqueño dijo que en esa temporada de huracanes, Tabasco estaba preparado. La numeralia era precisa: prioridad a más de 300 mil personas de 760 localidades situadas en zonas de mayor riesgo, según Protección Civil. Había 905 albergues en los 17 municipios, con capacidad para recibir a más de 134 mil tabasqueños. En 1999 se habilitaron sólo 702 refugios con capacidad para 56 mil 411 personas.
El director de Protecciòn Civil de Tabasco, Rúrico Domínguez Mayo, estimaba que 77 mil familias, integradas por 61 mil hombres, 92 mil mujeres y 155 mil niños, son las más factibles de sufrir afectaciones por el incremento en los niveles de los ríos.
Félix, empero, dejaba huellas en Tabasco. Se preveían lluvias fuertes en la región de Los Ríos, donde los escurrimientos provenientes de las sierras de Chiapas y Guatemala, y el posible incremento del nivel del río Usumacinta, podrían poner en riesgo a casi 44 mil personas, asentadas en 136 localidades tabasqueñas. Los Ayuntamientos de Balancán, Emiliano Zapata, Jonuta y Tenosique habían instalado 94 albergues temporales con capacidad para recibir a casi 27 mil personas, con servicios médicos, alimentos calientes, agua potable y cobertores.
Incluso el presidente Felipe Calderón Hinojosa había ofrecido, desde ese principio de septiembre, ayuda inmediata a Tabasco. El entonces secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, se había comunicado telefónicamente con Granier para hacer ese ofrecimiento.
El entonces director local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Armando Padilla Herrera, dio a conocer que todos los ríos de Tabasco y las presas del Sistema Hidroeléctrico del Alto Grijalva, se encontraban por debajo de sus capacidades de regulación. La totalidad de los ríos se ubicaban, segùn Padilla, entre los 1.36 y 6.85 metros por debajo de sus niveles máximos, como es el caso del Samaria y Tacotalpa, respectivamente. La onda tropical 30, localizada sobre Veracruz, se desplazaba al oeste. Es decir, se alejaba del territorio tabasqueño.
Después de la contingencia, de la Gran Inundación, Padilla Herrera fue renunciado. Ahora, a un año de aquello, es un asesor del presidente municipal —perredista— de Jalpa de Méndez, desde donde pontifica sobre cuestiones hidráulicas y critica al gobierno granierista. Lodos de aquellas aguas estancadas.
Pero entonces, dos meses antes de la inundación del 2007, hasta con el presidente municipal de Centro, Evaristo Hernández Cruz, las aguas corrían tranquilas: en la reunión se dijo que adicionalmente a los trabajos que se realizan con motivo de las lluvias, el Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Tabasco (SAPAET), y el Sistema de Agua y Saneamiento (SAS) del municipio de Centro, desazolvan las redes sanitarias de Villahermosa, villas y poblaciones que cuentan con esta infraestructura.
LA AUSENCIA DE EVARISTO
En los días que Villahermosa se fue a pique, el alcalde de Villahermosa no aparecía. Desde el 28 se había visto al gobernador alertando al pueblo para que tomara providencias y abandonara las zonas de peligro. Evaristo no aparecía.
Algunos medios informativos dieron a conocer que mientras las aguas inundaban Villahermosa, Evaristo y una de sus familias paseaban por Canadá. Algunas fotografías ilustraban la noticia. Reapareció cuando el presidente Calderón visitó áreas inundadas de la capital tabasqueña. En el mercado Pino Suárez, uno de los sitios de mayor contaminación por las aguas estancadas y los alimentos descompuestos, mientras Calderón y Granier andaban con tapabocas, el alcalde mostraba su mejor sonrisa a la prensa, se dejaba ver cerca del presidente.
Con el tiempo acusaría a Granier en el sentido de que la televisión oficial y otros medios no lo enfocaban cuando, en compañía del gobernador, recorría las zonas de peligro antes de la inundación. “Entrevistaban al gobernador cuando se encontraba lejos de mí, cuando se apartaba para que lo entrevistaran”, dijo en una reunión a pregunta de este reportero.
Después de que las aguas pasaron con su fatal mensaje de grandes daños a la economía y a la sociedad, el alcalde de Villahermosa se dedicó a enfrentar al mandatario de Tabasco. Pero también se supo que los cárcamos y el sistema de drenaje no habían funcionado para aligerar la salida de las aguas de la ciudad.
La propia Conagua denunció este año 2008, antes de los tiempos de las grandes lluvias, que las bombas y otros equipos de los cárcamos de Villahermosa estaban en el abandono. Que no se invirtieron los casi cien millones de pesos que la Federación había enviado al Ayuntamiento de Centro para rehabilitarlos.
Villahermosa podía inundarse más por las aguas de lluvia que sobre ella caen, antes que por las corrientes del Grijalva y el Carrizal. Evaristo ha corrido con suerte. Sobre la capital no ha llovido lo suficiente y con una precipitación de sólo 70 milímetros ya se encharcaron calles y colonias. Aunque sólo una vez.
Pero en septiembre de 2007, en la primera reunión de Protección Civil y sesión extraordinaria de la Comisión de Fenómenos Hidrometeorológicos, nadie pensaba en lo que vendría con y después de la inundación.
El agua se sentía amenazante, pero no peligrosa. El viernes 7 de septiembre, pescadores de Chilapa y el representante de la Unión de Pescadores del Río Grijalva, en Centla, Norberto Ramón Compañ dijeron sentirse satisfechos por el apoyo que el Gobierno del estado brinda a los pescadores. “Ningún gobierno nos había apoyado como lo ha hecho El Químico”, aseguró al agregar que luego de dos años de solicitar el apoyo, esta administración los respaldó con seis motores fuera de borda.
El agua era carretera y fuente de provisión: Francisco Gordillo Cruz, originario del poblado Ignacio Zaragoza había acudido, el jueves 6, a Villa Cuauhtémoc a recibir de manos del gobernador Andrés Granier un paquete piscícola, el cual sería de gran beneficio para la agrupación San Juan. Esmeralda Velázquez Hernández, de la ranchería Chilapa, recibió motores fuera de borda con los que, dijo, se facilitará el trabajo de los pescadores de esa comunidad.
Las construcciones en áreas inundables o zonas de posible inundación o al menos en sitios “islas” en las inundaciones, no eran, tampoco, preocupación: El martes 11 de septiembre, Granier Melo entregó casas del fraccionamiento Pomoca, uno de los desarrollos viviendísticos más grandes de Tabasco, a seis kilómetros de Villahermosa, rumbo a Nacajuca, y colocó la primera piedra del conjunto habitacional Anexo Las Rosas, donde se desarrollarán 72 viviendas.
En Pomoca se habìan entregado hasta esa fecha mil 504 casas, de un total de dos mil 212 de tipo económico que se construyen en beneficio de quienes comprueben ingresos de uno a tres salarios mínimos. La inundación del 2007 no le llegó, aunque lo dejó como una isla.
TIEMPO DE RECUENTO
A finales de octubre y principios de noviembre de 2007, la tragedia rebasó todo. Eso ya es historia contada. Incompleta tal vez.
El 31 de octubre de 2007, a pocas horas de la Gran Inundación, Andrés Granier vivía la tragedia de su pueblo: “¿A dónde vamos a meter a los miles y miles de tabasqueños que están deambulando por las calles de Villahermosa? —preguntó al jefe del Ejecutivo federal—, porque si usted se fijó, ahorita que veníamos, el número de personas que venían caminando en las calles con bolsas, pero le garantizo que cada casa de cada pueblo es un albergue, porque la gente sabrá albergar a uno y a otro, y que vamos a compartir la comida y el agua, que a pesar que nos está ahogando, usted vio en el albergue que falta agua, falta comida, faltan colchonetas, falta leche para los niños”.
Las partes altas de Villahermosa era un mar de gente. Los tabasqueños habían huido de las zonas que el agua iba recobrando, de los fraccionamientos y colonias construidos en partes bajas, inundables. De las 300 mil personas de 760 localidades situadas en zonas de mayor riesgo, de los 905 albergues en los 17 municipios, con capacidad para recibir a más de 134 mil tabasqueños, se llegó a tener más de un millón de personas afectadas. Las cifras fueron dadas, mucho después, por la CEPAL.
La Gran Inundación se llevó mucho y dejó mucho. Las crónicas publicadas en Diario de la Tarde y en sitios de Internet, así como lo publicado en El Heraldo, me dieron el Premio México de Periodismo que otorga la Fapermex. Ahora es tiempo del recuento.

DEFENSA HIDRÁULICA

Transparencia281008Inunda


TRANSPARENCIA
POLITICA
Por Erwin Macario

Aguas de Tabasco

Y el hombre sufre el estrago,/ mas a pesar de su pena,/ admira al río que mata/ con su salvaje belleza.
José María Gurría Urgell

Voces aisladas, vox clamantis in acqua, han alertado en Tabasco sobre el peligro de las inundaciones. Unas de ellas ha sido la de Leandro Rovirosa Wade, quien, como gobernador, intentó una salida al mar. Otras, actuales, se pierden en el ruido mediático, en la creciente… y la ganancia de pescadores.
La cronista de Villahermosa, Gabriela Gutiérrez Lomasto es voz que clama. Su más reciente pre-texto para “aguarle” la fiesta a algunos, es el prólogo a la publicación que sobre el tema hizo Carlos Elías Dagdug Martínez, licenciado en derecho, notario, maestro universitario, político, caminante—navegante.
“Siendo muy joven tuve la fortuna de conocer mi estado a través de la navegación fluvial al viajar con mi padre, el señor Elías Sabino Dagdug Antonio, en las embarcaciones que recorrían los ríos de Tabasco operando rutas fluviales por falta de carreteras”, explica Carlos Elías en su trabajo “Tabasco, sus ríos, sus inundaciones y el plan hidráulico”, de reciente aparición.
Es un trabajo de vivencias, como acertadamente señala la tercer cronista de Villahermosa. Una obra que “nos hace navegar, en la balsa de los recuerdos, nuestros hidráulicos espacios”.
Y es cierto: “Sin lugar a dudas, los tabasqueños somos en mucho, mitad pez y mitad pájaro, por eso el agua es parte de nuestra propia existencia; en su espejo nos hemos visto crecer y desaparecer, sin ella no tendríamos historia”.
Dagdug Martínez ha llevado al papel su pasión por los ríos, desbordada sobre las mesas de amigos, en las reuniones. Lo que ha vivido, primero invitado a los viajes fluviales, después como heredero de la tradición transportista que don Elías Sabino “saltó” a tierra firme —pantanosas a veces— cuando “las carreteras y caminos pintaron su raya por los rumbos destinados al transporte automotriz que habría de suplir al fluvial y que cambió el destino de la historia de Tabasco”.
El autor del trabajo que pronto será presentado, —tal vez sólo en aulas universitarias, como se hizo anoche lunes ante estudiantes de la licenciatura en Periodismo que en Tabasco imparte la Universidad Autónoma de Chihuahua con apoyo de la Universidad Tecnológica de Tabasco— es testigo, pues, de al menos medio siglo del correr de las aguas tabasqueñas.
Ha visto frenarse obras como el cauce de alivio Samaria-Golfo de México; suspenderse otras como la presa Itzantum que, al controlar las aguas del río de la Sierra, hubiera evitado la Gran Inundación del 2007 y la amenaza que como espada hidrológica se cierne sobre Villahermosa.
Ha sentido el desencanto de otras, como el dragado de la barra de Frontera, en la que, incluso, como funcionario del gobierno de Salvador Neme, intervino en busca de una solución.
Su trabajo no es sólo una crónica de las inundaciones de Tabasco sino una voz que, como otras que no quieren escucharse, aporta propuestas y suma la suya a las de los que hemos visto correr las aguas, llover “sobre lo más hondo del alma” cuando los pescadores a río revuelto, de ayer y hoy, tiran sus redes de corrupción y detienen las obras que debían detener las fuerzas de la naturaleza hidrológica de Tabasco.
Así, Carlos Elías Dagdug Martínez, nos revive la memoria lacustre y pugna porque los ríos de Tabasco recobren su memoria hidráulica, que las autoridades tengan conciencia histórica y actúen para evitar nuevas catástrofes que afecten económica y socialmente a Tabasco, mediante el desarrollo definitivo del Plan Hidráulico de Tabasco, un sueño que nació en los tiempos de Tomás Garrido Canabal.
Las conclusiones del autor de “Tabasco, sus ríos, sus inundaciones y el plan hidráulico” advierte que este plan no puede consistir nada más en drenar las aguas de los ríos, porque eso nos llevaría a desertizar la entidad.
Insiste, eso sí, en que es necesario el dragado de los ríos, principalmente del Grijalva, del Mezcalapa, del Carrizal y del Usumacinta para desazolvarlos, pues sólo de esta manera lograrán contener un mayor caudal para evitar su desbordamiento. La arena que se extraiga de ellos puede aprovecharse para obras de construcción de distinta naturaleza.
También propone retomar el proyecto de la Presa Itzantum y sugiere desazolve de las presas del sistema del Alto Grijalva (Angostura, Chicoasen, Malpaso y Peñitas) para permitirles una capacidad mayor de almacenaje de agua; que se construya la compuerta de Malpaso para desviar parte del agua al río Uxpanapa, disminuyendo el volumen que recibe el Mezcalapa, con lo que se reduciría el riesgo de inundaciones en Tabasco y parte de Chiapas.
La construcción adecuada de bordos de defensa complementaría el control de las aguas y es indispensable que las autoridades estatales y municipales no autoricen ya fraccionamientos ni otras obras que afecten los vasos reguladores y drenajes naturales de los ríos, arroyos y lagunas.
La conclusión de la compuerta del Macayo —prueba de la ineficiencia y la corrupción que este columnista ha señalado— así como de las escolleras en la desembocadura del Grijalva, en Frontera, son otras de las insistencias del autor.
Así, tendremos levedad en la tragedia y no nos afectará tanto lo que, bien dice la cronista Gaba Gutiérrez, son “la falta de construcción de los bordos de contención, el frustrado PICI de vergonzosa historia, así como la agresiva turbinación por las razones de sobra sabidas, y claro, la luna de octubre, las lluvias, el cielo y las estrellas”.

CRÓNICA AMIGA

Manifiesto100308
José Chablé Ruiz

Arturo Núñez es mi compadre: Granier. Reunión cordial en una mesa plural
El Heraldo de Tabasco
10 de marzo de 2008

A la Mesa de Pancho Peralta, ayer domingo, la mayoría de sus integrantes llegó igual de temprano a como suele hacerlo el director de la Revista Mesa 42, entre siete y media y ocho de la mañana. A la mesa del Camino Real también llegaron otros personajes ajenos a la cita dominical pero esta vez lo hicieron porque había un invitado especial: el gobernador Andrés Granier Melo.Desde el sábado por la mañana, el abogado Francisco Peralta Burelo convocó a todos los asiduos a desayunar los domingos en el Camino Real con él, a que llegaran muy temprano porque estaría un invitado sorpresa.El primero en llegar al desayunadero fue el propio Pancho Peralta y sorprendió a la mayoría encontrar a Agapito Domínguez Lacroix. Uno a uno, antes de las ocho de la mañana estaban ya reunidos los comensales Wilbert Méndez Magaña, Roberto Carrera Guzmán, Ferdusi Bastar Mérito, Pedro Javier Resendez Medina, César Funoy Rabanales, Jorge Colorado, Benjamín Zenteno Alanís, Manuel Ricardez, Eduardo del Rivero, Javier Nucamendi Otero, Ana Salinas, José Luis Cortes Moreno, Luis Andrés Pampillón Ponce; el corresponsal del Diario Reforma, Carlos Marí, así como el autor de esta columna.
José Luis Cortés protestó porque Manuel Ricárdez le había quitado el lugar que le correspondía de estar junto a Pancho Peralta, como lo hace cada domingo. Se comentaba la ausencia de Agenor González Valencia, Carlos Elías Dagdug Martínez, Erwin Macario Rodríguez y de Víctor de la Cruz Romero "Huimanguillo", y Pancho Peralta explicaba que no había localizado a Erwin Macario para avisarle de que llegara temprano y que el Maestro Agenor se encontraba en Puebla. En ese momento, por la vía celular Pedro Javier Reséndez localizaba al decano de los periodistas tabasqueños e informaba a la concurrencia de que se encontraba en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.
Sin previo acuerdo, todos coincidieron, a pesar de que algunos sostienen diferencias políticas con el gobernador Granier, a hacer de la reunión el principio de una serie de encuentros en los que prevalezca el respeto, la tolerancia, la propuesta y la contribución a resolver los grandes problemas de Tabasco.Se pidió a aquellos que pudieran hacer algún cuestionamiento fuerte a que no lo hicieran, porque habría que aprovechar la reunión con el gobernador Granier para demostrarle que en ese grupo no tiene enemigos, ni hay intolerantes.
Eduardo Estañol se comprometió a ser respetuoso y que no cuestionaría al gobernador Granier como lo había hecho en otra de las reuniones que había sostenido con la Mesa.
A las ocho en punto llegó el gobernador Andrés Granier Melo a la Mesa, acompañado de su Secretario Privado, Manolo Bravo, y de su Secretario Auxiliar, Gerald Washington Herrera, así como de los miembros de logística, quienes se quedaron a distancia del mandatario.Con el gobernador también llegó Carlos Elías Dagdug Martínez, quien prácticamente había alcanzado a sentarse al fondo de la mesa, pero Pedro Reséndez le cedió su lugar para que estuviera más cerca del gobernador y participara en el diálogo.
Sonriente y alegre, Andrés Granier saludó de mano a todos los presentes. Quince minutos después llegaría "Huimanguillo" como siempre, con su cara de "malos amigos", y Pancho Peralta dijo al gobernador Granier que Huimanguillo no quería estar en la Mesa, a lo que el gobernador le respondió que es amigo de Víctor de la Cruz Romero y así lo hicieron sentir ambos al fundirse en un fraternal abrazo.
En el transcurso de la plática con el gobernador Granier llegaron a la mesa Carlos Francisco Dagdug Cadena, Voltaire de Jesús Mendoza, Carlos Calzada y Eduardo Estañol Vidal.Pancho Peralta le dice al gobernador Granier que para romper el hielo debe considerarse que está entre amigos y que la plática será cordial, que no habrá cuestionamientos. El gobernador Granier sostiene que no hay hielo que romper, que considera amigos a todos los que se encuentran en la Mesa. Saluda efusivamente a Wilver Méndez Magaña y advierte que está dispuesto a responder cualquier pregunta que se le haga.
Tres temas centrales dominaron la plática. La política, las inundaciones y la inseguridad. El gobernador Granier reconoce que hay desaciertos en su gobierno, pero que los está corrigiendo. Defiende a su gabinete. Afirma que todos están trabajando. "Yo no llegue a ser gobernador para hacer un grupo político, puede haber desaciertos, lo reconozco, pero se me juzga por lo mínimo y no me han encontrado nada".
Reiteró volteando siempre a ver a todos: "Jamás ha estado en mí proyecto hacer un grupo político para apoderarme de Tabasco y nadie me puede descalificar de deshonesto porque no estoy haciendo negocios, estoy trabajando intensamente para los que me hicieron gobernador, que son los tabasqueños, el pueblo". Sostuvo: "El hombre necesita una oportunidad para demostrar lo que vale y yo estoy luchando por la gente más necesitada, necesito tiempo para demostrar la valía de este gobierno".
Andrés Granier rechazó que su gobierno sea de corte populista: "Yo no soy populista, lo que pasa es que no me he alejado de los que me hicieron gobernador, que es el pueblo, porque soy gobernador en contra de todos los grupos políticos, porque cuando fui a México tampoco fui a aliarme con los grupos políticos". Afirma que "no compito con nadie, ni busco catapultarme para algún puesto, para nada. Cuido las relaciones con el gobierno federal, no soy entreguista, he cometido errores pero nada graves".
Entre el intercambio de diálogos, César Funoy Rabanales compara su gobierno con el del extinto Salvador Neme Castillo, "quien gobernó con sus amigos y ya vio como le fue". Ataja Carlos Elías Dagdug para pedir que no se voltee a ver el pasado y que no debe hacerse esa comparación con el gobierno de Granier. La mayoría piensa que Granier se molestó y que se va a levantar de la mesa, porque pregunta a Manolo Bravo cuantas personas hay en la concentración del evento de mujeres rurales que va a encabezar en Dos Montes.
Granier responde: "No sostengo a nadie en el gobierno por amiguismo. ¿Cómo creen que se ganan los espacios ante el pueblo?, pregunta y contesta a la vez, es con resultados. Si no eres productivo la gente lo cataloga".Reconoce que solo tiene un amigo como funcionario dentro del gobierno: "Mi amigo de toda la vida es Humberto Mayans Canabal. No escucho a mis amigos al oído, soy crítico y soy muy exigente. No tengo más amigos, lo que tengo son los que he hecho en el camino".Sostiene que no gobierna desde la Quinta Grijalva sino desde las comunidades y que no está identificado con la corrupción. Recuerda que en su andar político siempre ha escuchado ese tipo de señalamientos. "Cuando trabajé con Taracena como director de Desarrollo Municipal se decía que estaba yo por arriba del alcalde porque hacia lo que quería. Cuando fui alcalde también fue lo mismo. Ahora en el gobierno no puedo transmitir el trabajo que hacen los demás".
En la mesa, dos interlocutores cuestionan el trabajo de Gustavo Rosario. El gobernador Granier lo defiende: "Gustavo Rosario ha hecho un gran esfuerzo, ustedes no saben como estaba la Procuraduría, la gran corrupción que había y se está combatiendo con firmeza".Defiende también el trabajo que realiza Paloma Robles como secretaria de Turismo: "lo está haciendo bien". Solo se queda callado cuando le refieren la ineficiencia en la dirección de Deporte a cargo de Melchy Franco. Acepta que una cosa es el discurso político y otra es lo que se hace. Y advierte que sus opositores lo cuestionan de todo. "¿Por qué no analizan? No me pueden descalificar, porque no estoy haciendo negocios. Los que llegan a la Quinta Grijalva se enloquecen porque sus mundos son diferentes, yo no llegué a hacer negocios".
Quiere explicar el caso de su hijo Fabián, pero los asiduos a la Mesa le manifiestan que no pierda el tiempo en aclarar esa situación porque no tiene importancia.Carlos Francisco Dagdug Cadena le recordó que él junto con Guillermo Narváez Osorio le había advertido, siendo precandidato a la gubernatura, que si llegaba a ser gobernador se seguirían metiendo con su familia. Comentó el exlíder del Congreso Estatal, que Granier llegó a la mesa del Vips de Ruiz Cortines dolido por lo que le publicaban por esos días unos periodistas de su familia.
Comentó el director de Vanguardia, José Luis Cortéz Moreno: son los mismos que sigue beneficiando el gobierno de Granier no obstante que se metieron con sus hijas. Hay que ver quién los protege. Abunda Granier que no llegó al gobierno a desplazar a alguien. "Vengo cumpliendo una función transitoria y quiero el tiempo para demostrar lo que puedo hacer por Tabasco. Gobierno un Tabasco muy diferente al que gobernaron otros, ya que está muy convulsionado políticamente. A través de la prensa, todos los días me quieren subir al ring, al escenario del descrédito, sin pruebas".
Reiteró que hoy que es gobernador ama más a Tabasco y que los "rencores hay que dejarlos en la casa, hay que gobernar Tabasco con madurez". En ese sentido dijo que su gobierno no va a voltear a ver el pasado, que mira hacia delante para reconstruir el estado. Que no guarda rencores ni resentimientos. Y suelta un comentario que los comensales recogieron: "A Arturo Núñez lo sigo considerando mi compadre a pesar de lo que me ha dicho y que él ya no me considera su compadre. Yo sigo considerando a Arturo mi compadre".
Insistió en que convocará una y otra vez a la sociedad a reconstruir Tabasco. "Nuestros hijos no tienen porque pagar la culpa de que Tabasco esté cerrado ideológicamente. Tabasco se hunde y eso no lo voy a permitir".
La Mesa de Pancho Peralta también festejó el cumpleaños del gobernador Granier partiendo un pastel por ese motivo.El gobernador Granier compartió el pan y la sal durante dos horas con la Mesa Dominical. Entusiasmado se comprometió a regresar a la Mesa para seguir conociendo la "percepción que ustedes tienen de Tabasco, porque es parte de la percepción que tienen los tabasqueños y es respetable", aunque volvió a quejarse de que se destaca más el escándalo que lo que se trabaja por los tabasqueños.Ya sin el gobernador Granier en la Mesa, los nuñistas se comprometieron entre sí a hablar con el Senador perredista Arturo Núñez Jiménez para que contribuya a la reconstrucción del estado, "porque vale la pena apoyar a Granier".

jueves, 23 de octubre de 2008

PRENSA, SIEMPRE PRENSA (RECUENTO)

Libro060208ZETA-1

TRANSPARENCIA
POLÍTICA
Por Erwin Macario


De alguna prensa

El dejar que la próxima buena noticia “se cuele” a favor del más importante competidor “del delincuente” es una forma segura de transmitir a éste último el
mensaje del disgusto oficial.
Tom Wicker/ De la prensa

La relación prensa–gobierno empieza en las propias oficinas de información y relaciones públicas, en todos los niveles; desde el más perredista ayuntamiento hasta el más priísta de los gobiernos municipales, gobierno estatal o las mismas dependencias administrativas.
Un mal entendido vínculo entre los comunicadores y las instituciones gubernamentales ha proliferado en los últimos tiempos. El “si no estás conmigo, estás contra mí” ha sido llevado a los extremos más radicales –y ofensivos–, en gran parte por los que actúan como voceros de la autoridad, sin que esto quiera excluir la parte de la culpa que a los titulares de los gobiernos corresponde.
Así, en torno a gobernadores, presidentes municipales y otros funcionarios de la administración pública estatal, y municipales, se han formado verdaderas mafias que no están al servicio de la comunicación, ni siquiera del propio gobierno, sino como verdaderos lacayos que, cerviz doblada y rodillera puesta, se dedican al incienso adulador y a enfrentar a quienes, con dignidad, saben que en el periodismo existe propaganda y publicidad, pero también conciencia ética.
El contubernio funciona. Y es un ariete contra medios que intentan ser un verdadero enlace entre el gobierno, como emisor y el pueblo como receptor no únicamente de anuncios, planes o programas, sino de la ejecución de estos.
En contra de los que se rebelan a esta actitud sumisa, de parte de la prensa, y corruptora, de parte de la autoridad, tiempos hubo en que desde Palacio de Gobierno se ordenó a los presidentes municipales no apoyar con publicidad a determinados periodistas incómodos. Eran los tiempos en que el Partido Revolucionario Institucional era amo y señor intocable en Tabasco.
Ahora parece que la cosa va al revés. Fuera de periódicos con tradición en los municipios tabasqueños se ha impulsado en los años recientes una gran cantidad de semanarios, quincenarios y publicaciones católicas que, aparte de actuar como meros boletineros oficiosos, han rebajado la profesión periodística y, en muchos casos, actúan como gatilleros del poder.
Un estudio en preparación sobre la prensa tabasqueña en estos años, que he titulado “Tabasco, el mejor lugar para escribir”, me ha dejado perplejo: hasta el momento he colectado más de sesenta medios informativos escritos, aparte de los 17 diarios que se editan en Villahermosa, tres de ellos vespertinos; otro del deporte y dos más de nota roja, entre los matutinos.
Desde muchas oficinas de información se alienta este crecimiento inusitado de medios. A la práctica de “la ordeña” en los recursos para la publicidad, que hizo millonarios en el gobierno pasado a Juan Carlos Castillejos y al propio jefe de prensa, Alberto Peregrino, –un muerto de hambre que tuvo la suerte de hacerse amigo del mesero Castillejos-, se ha agregado el “apoyar” a más periódicos sin ninguna función verdaderamente informativa, para restarle pagos publicitarios a los mismos diarios de Tabasco, así como a revistas y periódicos, y algunos periodistas, que han existido por más de diez años y no han ligado su suerte al lapso de un sexenio.
Se mantiene, de esta forma, un recorte –que es presión– a medios que no aceptan la servidumbre oficial; que desean hacer periodismo, servir al Gobierno, a las instituciones públicas, estatales o municipales, sin convertirse en amanuenses serviles. Delincuentes, para el poder, también se les niega información, invitaciones a actos públicos y se les castiga, como dice Wicker, filtrando información a quienes son sus competidores en los medios.
Quienes, -unos detrás del escritorio público, otros como lacayos en algunos medios-, están actuando así, no le hacen ningún favor ni a los alcaldes ni al propio Gobierno del Estado, en los casos que esto sucede.
Al tiempo.

EVOCAR A UN AMIGO

TRANSPARENCIA060107

El Heraldo de Tabasco
7 de enero de 2007
Adiós a Josè Frìas Cerino

Se le vio caminar solo con Ella,/ sin miedo a su guadaña.
Antonio Machado/ El poeta y la muerte

Ya no recibí tu llamada. Hace apenas unos días me pediste el número de mi celular, amigo. Que bueno, que aunque nos veíamos muy pocas veces, te agradecí la generosidad de tus conceptos para mi libro Periodismo y Utopía. Tus palabras y las de Toto fueron bellas y las estimo porque siempre los consideré los mejores periodistas en sus géneros: tú en la entrevista, Isidoro en la opinión.
Gracias, amigo. Aparte de lo legendario, que me endilgaste, no sabes cuánto levantó mi autoestima el que dijeras: "Erwin Macario Rodríguez ha tenido el talento extraño de conservarse siempre vigente en esta difícil profesión". Competiste con Toto en generosidad. Él dijo: "Si el periodismo es una utopía, entonces Erwin Macario es la esperanza y el compromiso permanente con la utopía. Leer a Erwin es servir al anhelo de todo hombre".
Donde estén, ya saben más que nosotros. Ya no te enteraste, leyendo, del destape de la cloaca nominal en el Ayuntamiento de Centro. Pero sabes si detrás de todo está el interés de poner en su lugar a Pedro Gutiérrez Gutiérrez, que se protegió con una regiduría. Ya ves, la primera lista de aviadores proviene de su campo de aterrizaje en el que habían, lo denunció la prensa, "activistas políticos, músicos, familiares y hasta novias de funcionarios, todos distribuidos en distintas áreas; pero en la Tesorería y Programación, Juan Manuel Torres y Javier Mollinedo, respectivamente, son quienes se servían con la cuchara grande".
Ya sabíamos, ¿verdad?, que el tesorero municipal había resuelto para siempre su problema económico. Nunca podría, como tú, amigo José Frías Cerino, llamarse pobre. Eso fue un pasado que siempre aborrecerá. Pienso, y ahora lo sabes mejor que antes, que Juan Manuel Torres, Javier Mollinedo y Pedro Gutiérrez rompieron en el Ayuntamiento de Centro la regla política que prohibe meter en nómina a las amigas. Ahora no tengo que contarte que al presidente del trienio pasado, don Galleto, alias José Antonio Compañ, no sólo le descubrieron como lo engañó el secretario del Ayuntamiento en los tiempos de su jefecito Florizel Medina Pereznieto sino como, -y columnistas como yo lo dijimos a tiempo-, jalaban el erario desde la Coordinación de Servicios Municipales, pues Lucio Lázaro es otro que, como La Patiñé, llegó con Pechel no sólo a esperar mejores tiempos con Roberto Madrazo, a soñar con más poder, sino a llenarse las faltriqueras para no volver a pasar hambre en todas su vida.
Claro, tú lo sabías y ahora lo sabes mejor, la corrupción es incolora, como decían que era el agua cuando estudiábamos. También era insípida e inodora, lo que no se puede decir del latrocinio. Sabe mal al pueblo, apesta. No tiene color, eso sí. Ya dejó de ser propiedad priísta: el sombrerudo perredista de Jalpa de Méndez dejó una plantilla de aviadores al nuevo alcalde Jesús Selván García. Todo eso, lo de Galletita, lo del PRD, tú lo sabes, amigo Frías Cerino y no podrás escribirlo. Quizás poco lo hagan.Oye, ya no pudimos analizar a los traidores perredistas que se fueron al PRI y fueron admitidos tan rápidamente que tales afiliaciones deberían estar en los record Guinnes: En dos días feriados José David Ascencio y Rocelia Elvira López, renunciaron al PRD y se afiliaron al PRI.
En ninguno de los dos partidos llenaron los requisitos. En el PRD ni siquiera han analizado sus renuncias y siguen siendo diputados plurinominales por ese partido, una cuota que la votación del pueblo le da al PRD. En el PRI hay un procedimiento para ingresar, que no pudo funcionar del 31 de diciembre de 2006 al primero de enero de 2007. No te rías.Ya lo explicó la dirigente estatal del PRI, diputada Gina Trujillo, la afiliación de esos dos esquiroles (el calificativo es mío, aunque le duela a mi admirador y colega Rodulfo que yo use adjetivos) ya funcionó. Fue clara en la entrevista con El Heraldo de Tabasco: "Finalmente lo que se logró con la incorporación de Rocelia y José David a la fracción parlamentaria fue darle gobernabilidad al Congreso. Y si el Congreso tiene gobernabilidad, el estado también.Por cierto que Gina vuelve a intentar poner al PRI en el camino, del que se desvió hace tiempo. Dice que debe vigilar a los presidentes municipales. Claro sin llegar a los extremos que hicieron que el gobernador Enrique González Pedrero le dijera a nuestro amigo Andrés Manuel López Obrador "que estaba en Tabasco, no en Cuba" y, finalmente, le quitara la presidencia estatal del PRI. Andrés Manuel estaba formando un gran cuerpo de contraloría social en el partido. No les gustó a los alcaldes de entonces.
¿Te acuerdas que el actual procurador de Granier, Gustavo Rosario Torres, era el presidente municipal de Centro? El PRI de Gina no aspira a tanto: "No, no, no. No quiero llegar a los extremos que ocasionaron la salida de Andrés Manuel López Obrador del Comité Directivo Estatal. No pretendo convertirme en la contralora de los presidentes municipales, pero si hago conciencia ante los compromisos que ellos asumieron con la militancia".Ya veremos en que acaba esto.
Gina ya negoció su permanencia en la dirigencia estatal del PRI. Es la que prácticamente manda en el Congreso, mientras aprende José del Carmen Escayola.Ya no pudimos comentar sobre el equipo de Granier. Lo he estado analizando en esta columna. Aparte de los nombres que trascendieron oficialmente, ya sabes que tiene asesores de lujo para que no le falle la política. Si en algo fallara la experiencia de Humberto Mayans Canabal, el gobernador tiene como asesor en política e imagen a Juan Carlos Castillejos Castillejos ¿?. Por ahí también está Feliciano Calzada Padrón y en materia de cultura y educación está como asesor Gerardo Bravata. Sí, el del puro. No te pierdes de mucho, amigo Frías Cerino. Arturo Núñez seguirá en activo. Las traiciones continuarán en el PRD, yo veo que con José David y Rocelia lo único que pasó es que les salió más barato el asunto al Congreso. Pero no tienen necesidad de que se afilien los diputados de oposición: con que les den sus votos es suficiente. Así se ha operado.Bueno amigo, es una lástima que no se sienta a veces cuando se acerca la hora de integrarse al Cosmos. No nos hubiésemos perdido tu despedida. En eso lleva ventaja Pedro Luis Hernández Sánchez que nos dijo adiós desde su lecho del dolor. Otros amigos se han ido silenciosamente, como tú lo hiciste, amigo.
Dios te cuide.