Tp060910InundaRN
TRANSPARENCIA
POLÍTICA
Por Erwin Macario* erwinmacario@hotmail.com
Mucho ayuda el que no estorba
Quien quiera colaborar, que haga
su parte pero con responsabilidad
y unidad, anteponiendo la seguridad
de las familias tabasqueñas, sin
pretender sacar raja política.
Jesús Alí 010910
Más directo que el gobernador Granier fue el alcalde de Villahermosa. Lo hizo con el derecho de los que, junto a su pueblo, viven la contingencia del 2010. No anda vacacionando como lo hizo, en la inundación del 2007, Evaristo Hernández, su antecesor, que huyó unos días al extranjero.
Y tiene razón Jesús Alí de la Torre, como la tiene Andrés Granier.
Debía agregársele a sus discursos, dentro el agua: “mucho ayuda el que no estorba”.
Estos no son tiempos de tomarse la foto sino de estar al lado del pueblo. Orientarlo, advertirle del peligro, pero también escucharlo.
Tiempos de unidad, no levantar protestas, promover enconos, desorientar, como intentan hacerlo algunos políticos oportunistas en la zona de Tamulté de las Sabanas y en algunas partes de las riberas del Grijalva y Carrizal.
En estas horas difíciles, con la amenaza de caudales mayores provenientes de la presa Peñitas hay que escuchar al gobernador de Tabasco en su llamado de unidad, y también al alcalde de Villahermosa.
Jesús Alí de la Torre, el día del informe del presidente Felipe Calderón, advirtió: “tanto la política como los falsos líderes deben hacerse a un lado porque son momentos de actuar de manera cohesionada y responsable, de anteponer nuestros verdaderos intereses como comunidad en lugar de tratar de sacar raja política, lo cual además de deplorable, atenta contra la seguridad e integridad de los tabasqueños”.
Mucho ayuda el que no estorba.
No fue una declaración de banqueta, una rueda de prensa en la comodidad de una oficina.
Al igual que lo hace Andrés Granier y los coordinadores de las fracciones partidistas del Congreso de Tabasco así como algunos otros funcionarios estatales, el presidente municipal de Centro anda en los sitios en los que hay desinformación, inquietud, miedo a veces, por las medidas que han tenido que tomarse para evitar el colapso del sistema hidrológico de la sierra de Chiapas, de las presas que desfogan y turbinan por Peñitas. Con el riesgo para Tabasco.
Lugares inundados o amenazados a los que ahora no llegó Felipe Calderón, que sí vino, ayer martes 7, víspera del día en que los tabasqueños recordamos al Caballero de la Lealtad, únicamente a tomarse la foto. Ni se metió al agua ni se juntó con el pueblo.
Esta vez Felipe sobrevoló las áreas donde se han desviado las aguas para quitarle volumen al Grijalva y al Carrizal —Tintillo y Acachapan y Colmena, así como la obra inconclusa de las compuertas del Macayo y tocó tierra firme en la colonia Casa Blanca, donde le explicaron qué se está haciendo dentro del llamado Plan Hídrico.
No quiso estorbar, tal vez. Pero tampoco ayudar.
Retomemos: en verdad estas son horas de aportar por Tabasco. De servir a los tabasqueños en problemas. Con claridad lo dice el alcalde Alí, que no huye a la inundación, como lo hizo el anterior: “todo aquel que quiera colaborar, que haga su parte, porque hay mucho que hacer para aliviar caminos, apoyar a la gente en sus colonias, mantener un buen esquema de seguridad, además que son tiempos de actuar con responsabilidad, unidad y cohesión para mantener la esperanza y enfrentar 60 días más de temporal y las posibilidades de creciente”.
La inundación de 2010 —que puede ser mayor que la del 2007— no será sólo recuento de corrupciones que de nuevo afloran, sino, de nuevo, de la solidaridad. Y de unidad en la tragedia. Por eso no debe politizarse sobre las aguas, infectarlas con los desagües de la política.
Es tiempo de unidad. Mañana, de nuevo, cuando las aguas pasen, se tendrá que pedir cuentas claras. Enfrentar a quienes han fallado, en la Conagua, con algunas obras necesarias que se sienten cuando se nota cómo han funcionado las que sí realizaron. Exigirle, otra vez, al presidente Calderón que le cumpla a Tabasco.
Pero hoy hay que cuidar la casa. Y a sus habitantes.
LADO OSCURO
Estoy en Tabasco, supervisando las obras del Plan Hídrico realizado para evitar la inundación de Villahermosa. Está funcionando muy bien. (Felipe Twitero)
LADO CLARO
Ah. Muy bien. Excelente.
TRANSPARENCIA
POLÍTICA
Por Erwin Macario* erwinmacario@hotmail.com
Mucho ayuda el que no estorba
Quien quiera colaborar, que haga
su parte pero con responsabilidad
y unidad, anteponiendo la seguridad
de las familias tabasqueñas, sin
pretender sacar raja política.
Jesús Alí 010910
Más directo que el gobernador Granier fue el alcalde de Villahermosa. Lo hizo con el derecho de los que, junto a su pueblo, viven la contingencia del 2010. No anda vacacionando como lo hizo, en la inundación del 2007, Evaristo Hernández, su antecesor, que huyó unos días al extranjero.
Y tiene razón Jesús Alí de la Torre, como la tiene Andrés Granier.
Debía agregársele a sus discursos, dentro el agua: “mucho ayuda el que no estorba”.
Estos no son tiempos de tomarse la foto sino de estar al lado del pueblo. Orientarlo, advertirle del peligro, pero también escucharlo.
Tiempos de unidad, no levantar protestas, promover enconos, desorientar, como intentan hacerlo algunos políticos oportunistas en la zona de Tamulté de las Sabanas y en algunas partes de las riberas del Grijalva y Carrizal.
En estas horas difíciles, con la amenaza de caudales mayores provenientes de la presa Peñitas hay que escuchar al gobernador de Tabasco en su llamado de unidad, y también al alcalde de Villahermosa.
Jesús Alí de la Torre, el día del informe del presidente Felipe Calderón, advirtió: “tanto la política como los falsos líderes deben hacerse a un lado porque son momentos de actuar de manera cohesionada y responsable, de anteponer nuestros verdaderos intereses como comunidad en lugar de tratar de sacar raja política, lo cual además de deplorable, atenta contra la seguridad e integridad de los tabasqueños”.
Mucho ayuda el que no estorba.
No fue una declaración de banqueta, una rueda de prensa en la comodidad de una oficina.
Al igual que lo hace Andrés Granier y los coordinadores de las fracciones partidistas del Congreso de Tabasco así como algunos otros funcionarios estatales, el presidente municipal de Centro anda en los sitios en los que hay desinformación, inquietud, miedo a veces, por las medidas que han tenido que tomarse para evitar el colapso del sistema hidrológico de la sierra de Chiapas, de las presas que desfogan y turbinan por Peñitas. Con el riesgo para Tabasco.
Lugares inundados o amenazados a los que ahora no llegó Felipe Calderón, que sí vino, ayer martes 7, víspera del día en que los tabasqueños recordamos al Caballero de la Lealtad, únicamente a tomarse la foto. Ni se metió al agua ni se juntó con el pueblo.
Esta vez Felipe sobrevoló las áreas donde se han desviado las aguas para quitarle volumen al Grijalva y al Carrizal —Tintillo y Acachapan y Colmena, así como la obra inconclusa de las compuertas del Macayo y tocó tierra firme en la colonia Casa Blanca, donde le explicaron qué se está haciendo dentro del llamado Plan Hídrico.
No quiso estorbar, tal vez. Pero tampoco ayudar.
Retomemos: en verdad estas son horas de aportar por Tabasco. De servir a los tabasqueños en problemas. Con claridad lo dice el alcalde Alí, que no huye a la inundación, como lo hizo el anterior: “todo aquel que quiera colaborar, que haga su parte, porque hay mucho que hacer para aliviar caminos, apoyar a la gente en sus colonias, mantener un buen esquema de seguridad, además que son tiempos de actuar con responsabilidad, unidad y cohesión para mantener la esperanza y enfrentar 60 días más de temporal y las posibilidades de creciente”.
La inundación de 2010 —que puede ser mayor que la del 2007— no será sólo recuento de corrupciones que de nuevo afloran, sino, de nuevo, de la solidaridad. Y de unidad en la tragedia. Por eso no debe politizarse sobre las aguas, infectarlas con los desagües de la política.
Es tiempo de unidad. Mañana, de nuevo, cuando las aguas pasen, se tendrá que pedir cuentas claras. Enfrentar a quienes han fallado, en la Conagua, con algunas obras necesarias que se sienten cuando se nota cómo han funcionado las que sí realizaron. Exigirle, otra vez, al presidente Calderón que le cumpla a Tabasco.
Pero hoy hay que cuidar la casa. Y a sus habitantes.
LADO OSCURO
Estoy en Tabasco, supervisando las obras del Plan Hídrico realizado para evitar la inundación de Villahermosa. Está funcionando muy bien. (Felipe Twitero)
LADO CLARO
Ah. Muy bien. Excelente.
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